Disfrutadlo juntos

Estar embarazada, o ayudar a la persona que amas a quedarse embarazada, es poderoso y un extraño viaje del ego. Saboread ese sentimiento juntos. Disfrutad del tiempo que pasáis juntos, o al menos intentad daros cuenta de que tenéis ese tiempo a solas, antes de que todo cambie. Aunque tengas suerte y no tengas que lidiar más adelante con noches de vigilia o llantos por cólicos, la mayoría de las relaciones se ponen a prueba una vez nace el/la bebé. Si te aseguras de hacer cosas divertidas antes de que nazca el/la bebé, tendréis buenos recuerdos del embarazo que será bueno rememorar durante los primeros años de la infancia.

Trata de dar rienda suelta a tu lado más infantil y sentimental. Hablad con el bebé boca abajo, halagaos el uno al otro y jugad a ser familia. Deleitaos en lo precioso/a que será el/la bebé con los padres tan estupendos que tendrá, será como un bálsamo para vuestra relación. Poner nombres graciosos al/a la bebé mientras está en la barriga refuerza el sentimiento de «nosotros». Hablar sobre posibles nombres y hacer una lista con los favoritos son algunas de las cosas más emocionantes de esperar un/a bebé. Como quiera que llames al/a la bebé, una vez que hayas tomado una decisión, te parecerá el nombre más bonito del mundo, perfecto para tu bebé.

Esperar un bebé puede ser abrumador para ambos padres. La mujer embarazada tendrá cambios de humor y episodios incontrolados de llanto, y su pareja podría sentirse excluida. De vez en cuando, la vida sexual será inexistente. No importa cómo estén las cosas entre vosotros, el mejor consejo es la comunicación. No tengas miedo de abrirte y hablar sobre cómo te sientes, tanto personalmente como en pareja. Con un buen diálogo, os acercaréis más, puede que incluso a un nivel aún más profundo que antes. Y solo eso ya será un gran logro.